Recolectores de basura en Valdivia trabajaron tres semanas sin acceso a agua potable
Durante cerca de tres semanas, los trabajadores encargados de la recolección de basura y mantenimiento urbano en Valdivia realizaron sus labores sin acceso a agua potable en las instalaciones ubicadas en el sector Corvi. La situación fue considerada por ellos como una falta de respeto, ya que se trata de un servicio básico exigido por ley.
La causa del corte habría sido el robo del medidor de agua. Aunque los trabajadores comprenden que se trata de un hecho fortuito, lo que generó mayor molestia fue la demora en restablecer el suministro, lo que se extendió por más de veinte días.
Estos trabajadores realizan funciones que implican contacto constante con suciedad: recogen basura, barren calles, cortan pasto y trabajan con tierra. Al regresar al lugar asignado para su descanso, se encontraban con baños inutilizables y sin posibilidad siquiera de lavarse las manos. Durante los primeros días, tuvieron que pedir agua a vecinos para hidratarse y enfrentar baños en condiciones insalubres, que terminaron cerrando con llave debido al mal olor.
El recinto en cuestión pertenece al municipio, pero está siendo utilizado por una empresa contratista a cargo del servicio. Según representantes sindicales, este tipo de incidentes no es nuevo, y anteriormente ya se había registrado el robo del medidor. Antes había un guardia de seguridad, pero últimamente no se ha visto vigilancia en el lugar.
El problema fue finalmente resuelto esta semana, tras la intervención de autoridades locales y la realización de una fiscalización por parte de la autoridad sanitaria, que inició un sumario. Desde la empresa responsable no se entregaron declaraciones oficiales sobre lo ocurrido.